Llega a México connacional enviado a Sudán por EE. UU.; SRE denuncia deportación arbitraria

Jesús Muñoz Gutiérrez, ciudadano mexicano que había sido deportado por Estados Unidos a Sudán del Sur en mayo pasado, arribó el domingo a la Ciudad de México, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

De acuerdo con la dependencia, el connacional llegó en un vuelo procedente de Juba, capital de Sudán del Sur, tras un proceso de asistencia consular que se extendió varios meses. “Después de dar seguimiento, atención y protección consular a Jesús Muñoz Gutiérrez, hoy por la tarde arribó a la Ciudad de México proveniente desde Juba”, señaló la cancillería en un comunicado.

“El connacional fue deportado el 20 de mayo de Estados Unidos a ese país de manera arbitraria, después de haber terminado una sentencia de 25 años”, señaló la cancillería en un comunicado.

En su historial figura una condena por asesinato en segundo grado en Florida, además de reportes de vínculos con la pandilla “Brown Pride”. Autoridades estadounidenses lo incluyeron en un grupo de siete personas señaladas como especialmente violentas, deportadas a África tras haber cumplido largas penas de prisión.

Para concretar su regreso, la SRE explicó que el embajador de México en Etiopía, Alejandro Estivil, se trasladó el 5 de septiembre a Juba para recibirlo personalmente. Posteriormente, personal de la embajada en ese país y del consulado en Frankfurt acompañó a Muñoz en su viaje de regreso.

En la Ciudad de México, Muñoz Gutiérrez fue recibido por Vanessa Calva, directora general de Protección Consular y Planeación Estratégica.

Según la SRE, durante todo el proceso la Embajada mantuvo comunicación “al más alto nivel” con Sudán del Sur para asegurar que el connacional estuviera bien, en buen estado de salud y dar seguimiento a su situación migratoria. En este plazo se mantuvo comunicación con su familia para actualizarles sobre las gestiones que se estaban realizando para su retorno seguro a México.

El gobierno mexicano subrayó que “la protección consular de las y los mexicanos, sin importar su estatus migratorio y el lugar del mundo en el que se encuentren, es la más alta prioridad de su política exterior”.