La exmujer reclama la mitad del piso y el marido da la vuelta a la tortilla cuando la convierte en 'okupa' ante la ley

Un hombre presentó en Finlandia para desalojar a su exmujer de la propiedad en la que residían antes de la separación alegando que la propiedad le pertenecía. Según este, la mujer no es propietaria del inmueble y no lo tiene bajo contrato de arrendamiento. 

El Tribunal de Distrito aceptó la demanda del hombre en octubre. La mujer apeló ante el Tribunal de Apelación de Helsinki, pero esta semana este tribunal desestimó su apelación, por lo que el veredicto del tribunal de distrito sigue vigente, según ha publicado el medio Iltalehti. La mujer vivió en esa residencia unifamiliar durante unos siete años. 

La polémica propiedad, de más de una hectárea, está situada en una zona rural pero dentro del Área Metropolitana de Helsinki. El hombre había comprado la propiedad a un pariente en 1991 antes de casarse. Sin embargo, la casa unifamiliar se construyó en el terreno durante el matrimonio. La pareja estuvo casada durante un cuarto de siglo y se divorció en 2018.

Después del divorcio, el administrador del patrimonio asignó la propiedad únicamente al marido en la división matrimonial, según resalta el mismo medio. La decisión estuvo aparentemente fuertemente influenciada por el hecho de que sólo el hombre tenía derecho legal a la propiedad y era el firmante de la escritura de compraventa de 1991.

La mujer se opuso a la demanda de su exmarido, alegando que la mitad de la propiedad le pertenece. Según ella, la propiedad fue adquirida como vivienda familiar según un plan conjunto de una pareja de novios. Después de casarse, la pareja contrató una hipoteca conjunta. La propiedad fue hipotecada al banco por 350.000 marcos para los préstamos.

El préstamo se pagó entre 1994 y 1997. Según la mujer, contribuyó a sustentar a la familia y a mantener la propiedad mediante su empleo remunerado durante todo el matrimonio. Además, agregó que, tras romperse el matrimonio, ella se ha hecho cargo del mantenimiento y las compras del inmueble, invirtiendo mucho dinero en él, un total de 35.737 euros.

La mujer también planteó ante el tribunal el hecho de que había presentado una denuncia penal por lo que consideraba una propiedad poco clara. La investigación del asunto continúa en curso en la Policía de Uusimaa Occidental.